Y tú, ¿Qué eliges?
¿Por qué cuesta tanto elegir lo que comemos?
¿Por qué abusamos de la comida basura, si sabemos cuánto nos perjudica?
Teniendo en cuenta que es un problema de salud pública significativo que tiene varias dimensiones y consecuencias, aquí dejo algunas razones por las que lo hacemos:
Disponibilidad y accesibilidad: La ubicación de restaurantes de comida rápida suelen ser más accesibles y a menudo más económicos que opciones de alimentos saludable y frescos. Lo que puede llevar a una mayor dependencia de este tipo de alimentos.
Economía: Los alimentos altos en calorías y bajos en valor nutricional son más baratos que los alimentos frescos y saludables.
Falta de educación nutricional: esta falta de conocimientos hace que no seamos conscientes de los riesgos asociados que este tipo de alimentación conlleva.
Estrés: puede llevarnos a patrones de alimentación poco saludables, incluida la dependencia a este tipo de comida.
Escasez de tiempo: falta de tiempo para preparar comidas en casa, hace que nos aventuremos a ingerir alimentos poco saludables.
Políticas públicas y regulación: La regulación gubernamental y las políticas alimentarias podrían desempeñar un papel importante en la promoción de opciones alimentarias más saludables y en la restricción de la publicidad de alimentos no saludables.
Y, todo esto tiene unas consecuencias, aquí te menciono un par de ellas:
Impacto en la salud: obesidad y enfermedades crónicas como diabetes tipo 2, enfermedades cardiacas y presión arterial alta.
Transmisión de hábitos: se pueden transmitir de generación en generación. Los niños que crecen consumiendo este tipo de comida, tienen más probabilidades de seguir ese patrón en su vida adulta.
Parece que todo está en nuestra contra, pero hay una solución y esa solución es ELEGIR.
Elegir es saber elegir entre los alimentos que nos perjudican y los que nos benefician, pensando conscientemente en las consecuencias de nuestra elección.
Tú eliges cada día lo que vas a comer, lo que vas a beber, el ejercicio que vas a hacer, etc.
A partir de ahí, de tu elección, obtendrás uno u otro resultado. (Sentirte mejor, verte bien, estar más ágil, descansar mejor…)
Basta con pararte un momento a pensar cuales van a ser para ti los beneficios y las consecuencias de elegir una u otra opción.
En definitiva, es el DESEO, la decisión, la determinación y sobre todo la RESPONSABILIDAD, la que te ayude a conseguir lo que deseas.
Te voy a hacer dos preguntas.
¿Cuál es el resultado que quieres conseguir?
¿Cuál es la recompensa que obtendrás de elegir entre una u otra opción?
Si crees que ha llegado tu momento y que tu motivo por el que deseas cambiar es lo suficientemente grande, pero no sabes por dónde empezar, solo tienes que decírmelo.
Estaré encantada de ayudarte.
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Que aproveche.
Oli Martínez
Dietista y Coach Nutricional